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Organizado por Marta Lourenço, tuvo lugar en Lisboa el pasado 12 de enero de 2013 una jornada de trabajo dedicada a colecciones científicas como infraestructuras de investigación para las ciencias y las humanidades: Museus e coleçoes científicas como infraestrutura de investigaçao para as ciências e humanidades.
La sala del Museo Nacional de História Natural e da Ciência estaba abarrotada, con más de cien personas, en su mayoría relacionadas con colecciones científicas universitarias, desde observatorios astronómicos, gabinetes de historia natural, laboratorios de química y museos de ciencia. Además de la gran cantidad de asistentes (que como señaló un participante muestra un grado elevado de compromiso cívico), la otra novedad frente a reuniones semejantes fue la presencia conjunta de conservadores y responsables de museos, junto con especialistas procedentes del campo de las humanidades (y no solamente de historia de la ciencia) y de las ciencias (principalmente, de departamentos de biología y geología). Se trata, por lo tanto, de uno la materialización de esos foros híbridos que tanto han reclamado los especialistas en colecciones científicas y que son tan poco habituales, por no decir inexistentes, en nuestro entorno, en el que resulta también impensable la participación en estos debates de personas que ocupan cargos académicos y gubernamentales de relevancia con responsabilidad en la toma de las decisiones sobre las colecciones.
La sesión se abrió con una intervención de Cornelia Weber que presentó la red alemana de colecciones científicas universitarias que ha sido desarrollada en los últimos bajo la coordinación de la Universidad Humbolt de Berlín. Esta red, que se inició con la investigación de la autora para establecer el estado de las colecciones a principio del nuevo milenio, ha creado una red de museos que se reúnen cada año y producen diversos recursos de trabajo, entre ellos una página web con una lista de documentos, una base de datos colectivas de las piezas y, quizá lo más novedoso, unas recomendaciones de buenas prácticas que fueron publicadas en 2011 y que abordan varias cuestiones muy importantes: el establecimiento de estándares de calidad de las colecciones, el establecimiento de comités de trabajo para cada colección (con representantes académicos, conservadores y expertos de varias áreas) y recomendaciones para obtener apoyo gubernamental y fuentes de financiación. Las recomendaciones están disponibles en inglés (http://edoc.hu-berlin.de/umacj/2012/weber-95/PDF/weber.pdf) y podrían ser un punto de partida para documentos semejantes en otros entornos, incluyendo el nuestro, que podría complementar otros textos semejantes como el desarrollado en Gran Bretaña o las Recommendation on the governance and management of university heritage of the Council of Europe (2005): www.universeum.it/docs/RecommendationRec%282005%2913_EN.pdf
Varios coloquios han seguido a la conferencia. La primera mesa redonda se realizó con miembros de departamentos universitarios relacionados con la investigación en historia y sociología de la ciencia que han señalado la necesidad (pero también las dificultades) para transformar los instrumentos científicos en fuentes materiales (por ejemplo, conectándolos con las otras fuentes textuales de las que a menudo se encuentran separadas) y, al mismo tiempo, mantener su potencial uso en museos o en la divulgación y enseñanza de la ciencia. La segunda mesa redonda estuvo formada por investigadores en el área de la geología, la paleontología y la biología que han señalado la dimensión científica actual de las colecciones botánicas y zoológicas, que siguen siendo una herramienta de trabajo fundamental para muchos investigadores de estas áreas.
Por la tarde se ha realizado un taller con todos los participantes que se han dividido en dos salas, una de ellas dedicada a las cuestiones tratadas en la primera mesa redonda (humanidades) y otra centrada en la segunda (ciencias biológicas y geológicas). Se ha realizado una visita guiada a la excelente colección de la Escuela Politécnica y, finalmente, ha intervenido el rector de la Universidad de Lisboa, Antónia Novoa, que une a este cargo sus trabajos en el campo de la historia de la educación, en los que ha recalcado la importancia de las fuentes materiales.
Todas las sesiones de la reunión pueden verse en diferido en https://educast.fccn.pt/vod/channels/1juu8kfstm
Esperamos que este foro híbrido sirva para establecer herramientas colectivas de trabajo y para conectar las diversas líneas de investigación en este terreno, procedentes de campos tan dispares como la historia o la sociología de la ciencia, la museología y la biología o la geología. Y, todavía más importante, para que esta investigación guíe las acciones de los responsables académicos y gubernamentales en este terreno, en lugar de que, lamentablemente, muchas de las grandes decisiones en cuestiones de patrimonio científico se tomen desde el desconocimiento absoluto de estos trabajos, cuando no para resolver tediosas rencillas universitarias o, más triste todavía, para satisfacer la triste vanidad de personas que, por haber trabajado con estos objetos sin apenas apoyo oficial o por causas todavía más peregrinas y sorprendentes, consideran que estas colecciones son parte de su patrimonio personal, no un bien público que debe ser estudiado con rigor, conservado adecuadamente y puesto a disposición de los investigadores y del público en general. Es mucho lo que se puede aprender para evitar estos problemas en reuniones como las que han organizado nuestros colegas portugueses. La próxima reunión de la red Universeum, que se celebrará en Valencia a principios del verano de 2013, será una buena oportunidad para discutir estos asuntos con algunos de los participantes en la reunión de Lisboa.